Descubre todas las aportaciones que el ácido láctico le aporta a tu piel
El ácido láctico es un producto que aporta muchos beneficios para el cuidado de la piel, ya que actúa como exfoliante y reduce los signos de la edad. Sin embargo, el uso de este producto no es —por completo— una novedad.
A lo largo del tiempo, la leche ha sido un ingrediente base para diferentes artículos cosméticos, pues su textura y efectos para el cuidado de la piel son asombrosos. De hecho, en muchas culturas antiguas se utilizaba la leche como fuente de la juventud.
Los egipcios, griegos y romanos solían remojar sus cuerpos en leche de burra, con el fin de lucir con un aspecto joven, ya que contiene distintas vitaminas, como la A, B1, B2, B6, D y C, así como minerales, oligoelementos y otras propiedades que estimulan y protegen la piel.
Hoy en día, tomar baños de leche podría considerarse extravagante o incómodo para muchas personas, pero el ácido láctico es el sustituto, derivado de la leche, que te permitirá lucir radiante y te aportará otros beneficios, como reducir las manchas y las arrugas.
¿Qué es el ácido láctico?
Como se mencionó anteriormente, el ácido láctico proviene de la leche y se produce mediante la fermentación de la lactosa por la actividad microbiana, generalmente. No obstante, también se puede producir a partir de las frutas, como la caña de azúcar, las manzanas o las uvas. Incluso, es una sustancia que genera nuestro cuerpo al degradar las moléculas de la glucosa.
En los artículos para el cuidado de la piel, el ácido láctico funciona como un exfoliante perteneciente a los AHA’s o alfahidroxiácidos, los cuales se crean a partir de productos naturales y cuyo objetivo consiste en desprender la capa más externa de la piel para reducir los signos de envejecimiento.
¿Cómo ayuda el ácido láctico a la piel?
El ácido láctico aporta otros beneficios que de seguro te van a fascinar. En esta ocasión, explicamos siete efectos favorables que esta sustancia produce en tu piel para una apariencia más joven. ¿Estás lista?
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Reduce la irritación: en comparación con otros exfoliantes, es menos abrasivo, ya que sus partículas son de mayor tamaño y son menos intrusivas en los poros, ya que actúa de manera superficial en la piel. Así que, úsalo con confianza, pero con responsabilidad y ¡olvídate del ardor y disfruta de sus beneficios!
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Acción despigmentante: a lo largo del tiempo se crean manchas en la piel porque hay una exposición constante a los rayos del sol. Sin embargo, el ácido láctico actúa como despigmentante y nivela las tonalidades de la piel. Asimismo, puede reducir las manchas causadas por el acné.
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Remueve las impurezas: este exfoliante produce la descamación de la piel para deshacerse de todas las células muertas del exterior. ¡Prepárate para tener una piel nueva y hermosa!
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Mejora la textura: otro de los beneficios es que, al eliminar la piel muerta del exterior, el ácido láctico promueve la regeneración de la piel, la protege y le proporciona suavidad.
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Cierra los poros: uno de los objetivos principales en el cuidado de la piel consiste en eliminar los puntos negros. Muchas impurezas se adhieren e introducen en la piel, por eso, ayuda a cerrar los poros y le da luminosidad a tu cara.
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Aumenta la hidratación: además de ser un gran exfoliante, el ácido láctico evita que la piel pierda agua. Por lo tanto, aporta textura y elasticidad, además de reducir los signos de la edad.
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Disminuye arrugas: uno de los mejores antiarrugas es el ácido láctico. Al trabajar en la capa externa de la piel elimina aquellas microarrugas que por lo general se les subestima, pero que con el paso del tiempo se intensifican. Utiliza este producto para el cuidado de la piel y comienza a reducir las líneas de expresión.
Como podrás ver, el ácido láctico tiene muchos beneficios para el cuidado de la piel. Este exfoliante derivado de la leche tiene efectos rápidos, pero debes aplicarlo de manera responsable. Recuerda seguir las instrucciones y acude con tu dermatólogo cuando sientas algo fuera de lo normal.
Por Yoel Ynurrigarro
