¿Qué es el ácido láctico y por qué está en todas partes?
Si eres fan del skincare, seguro has oído hablar del ácido láctico.
Este ingrediente ha ganado popularidad en los últimos años y se ha convertido en un must-have en el cuidado de muchas personas.
Pero, ¿para qué sirve el ácido láctico?
El ácido láctico es un tipo de alfa hidroxiácido (AHA), un exfoliante químico que se extrae de la leche y otros productos fermentados.
Ayuda a eliminar las células muertas de la piel, dejándola más suave y luminosa.
Es perfecto si buscas una piel más uniforme y radiante.
¿Qué es el ácido láctico y cómo funciona?
El ácido láctico es uno de los alfa hidroxiácidos (AHA) más populares, conocidos por sus efectos exfoliantes.
Actúa descomponiendo los enlaces que mantienen unidas las células muertas de la piel en la capa superior, permitiendo que se desprendan más fácilmente.
Esto no solo suaviza la textura de tu piel, sino que también mejora la absorción de otros productos, potenciando su efectividad.
El ácido láctico es más suave que otros exfoliantes químicos como el ácido glicólico, lo que lo hace ideal para quienes tienen pieles sensibles o son nuevas en el uso de AHA.
Bueno y ¿qué es un AHA?
AHA son las siglas de "Alpha Hydroxy Acid" (Ácido Alfa Hidróxido), que es un tipo de ácido que se usa mucho en productos para el cuidado de la piel.
Es como un superpoder para tu rostro, porque ayuda a renovar la piel, eliminando las células muertas de la capa más superficial.
Así, tu piel se ve más suave, luminosa y fresca.
El ácido láctico es uno de los AHA más comunes.
Beneficios del ácido láctico para tu piel
Si estás considerando añadir el ácido láctico a tu rutina con productos dermatológicos, aquí tienes algunos de los beneficios más importantes que puedes esperar:
- Exfoliación suave: A diferencia de los exfoliantes físicos que pueden ser abrasivos, el ácido láctico exfolia químicamente, eliminando las células muertas sin dañar la barrera de la piel.
- Hidratación: Este ácido tiene propiedades humectantes, lo que significa que atrae la humedad del entorno a tu piel, manteniéndola hidratada.
- Mejora de la textura: Si tienes piel áspera o con manchas, el ácido láctico ayuda a suavizarla y mejorar su apariencia.
- Reducción de líneas finas: Con el uso constante, este ingrediente puede ayudar a disminuir la apariencia de líneas finas y arrugas.
¿Para qué tipo de piel es adecuado el ácido láctico?
Una de las grandes ventajas del ácido láctico es su versatilidad.
Aunque es más suave que otros AHA, sigue siendo muy efectivo para diferentes tipos de piel:
- Piel sensible: Es una opción excelente porque no es tan agresivo como otros exfoliantes químicos. Sin embargo, es importante realizar una prueba de parche antes de aplicarlo en todo el rostro.
- Piel seca: Gracias a sus propiedades humectantes, es ideal para quienes sufren de sequedad, ayudando a suavizar y mejorar la textura de la piel.
- Piel grasa o mixta: Ayuda a controlar el exceso de sebo y puede reducir la apariencia de los poros al eliminar la acumulación de células muertas.
Cómo usar el ácido láctico en tu rutina de belleza
El ácido láctico es un exfoliante potente, así que es importante saber cómo incorporarlo correctamente en tu rutina:
- Frecuencia: Si eres principiante, empieza usando productos con ácido láctico una o dos veces por semana. Puedes aumentar gradualmente la frecuencia según tu tolerancia.
- Aplicación nocturna: Existen diferentes productos nocturnos para tu piel Debido a que aumenta la sensibilidad al sol, es mejor usarlo por la noche.
- Hidratación: Siempre aplica una crema hidratante después de usar ácido láctico para mantener la piel hidratada y proteger su barrera natural.
Ácido láctico vs. otros exfoliantes químicos: ¿Cuál es mejor para ti?
Existen muchos exfoliantes químicos en el mercado, y cada uno tiene sus particularidades:
- Ácido glicólico: Es más fuerte que el ácido láctico y penetra más profundamente en la piel. Es ideal si buscas resultados rápidos, pero puede ser irritante para pieles sensibles.
- Ácido mandélico: Es aún más suave que el ácido láctico, lo que lo convierte en una excelente opción para pieles extremadamente sensibles o con tendencia al acné.
- Ácido salicílico: A diferencia de los AHA, este es un BHA y es excelente para pieles grasas y con tendencia a los brotes, ya que penetra profundamente en los poros para limpiarlos.
Si buscas una exfoliación suave pero efectiva, el ácido láctico es una gran elección.
Precauciones al usar ácido láctico
Aunque el ácido láctico es más suave que otros exfoliantes, sigue siendo un ácido que puede causar irritación si no se usa adecuadamente:
- Prueba de parche: Siempre haz una prueba de parche antes de incorporar un nuevo producto con ácido láctico.
- Protector solar: Aumenta la sensibilidad de tu piel al sol, así que es fundamental usar protector solar al día siguiente.
- Evita combinar con otros exfoliantes fuertes: Mezclar varios exfoliantes puede ser demasiado para la piel y causar irritación.
¿Cómo reacciona tu piel al ácido láctico y cuándo verás resultados?
Tu piel puede necesitar un tiempo para adaptarse al ácido láctico, especialmente si nunca has usado exfoliantes químicos antes.
Al principio, es normal experimentar una ligera sensación de hormigueo, pero esto debería disminuir con el uso regular.
En cuanto a los resultados, la paciencia es clave.
Aunque puedes notar una mejora en la suavidad de tu piel casi de inmediato, los resultados más significativos, como una textura más uniforme y una mayor luminosidad, suelen aparecer después de 4 a 6 semanas de uso continuo.
Mitos y realidades del ácido láctico
En el mundo del skincare, hay muchos mitos alrededor de los ingredientes populares.
Vamos a desmentir algunos:
-
Mito 1: El ácido láctico es solo para pieles maduras.
Realidad: Aunque es excelente para combatir signos de envejecimiento, cualquier persona puede beneficiarse de sus propiedades exfoliantes e hidratantes. -
Mito 2: Es agresivo para la piel.
Realidad: Es uno de los exfoliantes químicos más suaves disponibles, perfecto incluso para pieles sensibles si se usa correctamente. -
Mito 3: Solo se puede usar en invierno.
Realidad: Puede usarse durante todo el año, siempre y cuando uses protector solar durante el día.
Ahora que ya sabes para qué sirve el ácido láctico, ¿por qué no probar?
Si buscas mejorar la textura de tu piel, reducir manchas y conseguir una piel más luminosa, el ácido láctico es una excelente adición a tu rutina de cuidado facial.
Recuerda que, como con cualquier ingrediente activo, la clave está en empezar despacio y escuchar las necesidades de tu piel.
Con el uso constante y adecuado en productos de belleza, verás cómo este poderoso AHA transforma tu piel, dejándola más suave, uniforme y radiante.
¿Quieres cuidar tu piel y darle el amor que necesita?
¡En OnPost Beauty podrás encontrar servicios como microdermoabrasión, limpieza facial, yoga facial y más.